viernes. 10.10.2025
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Aparece ahorcado y muerto en la celda del Dueso, en Santoña, el conductor del atropello mortal a una mujer en la S-20 de Santander

Un funcionario de prisiones encontró el cuerpo en el recuento de presos de hoy, miércoles, sobre las 8.00 horas

Centro penitenciario El Dueso, en Santoña.
Centro penitenciario El Dueso, en Santoña.
Aparece ahorcado y muerto en la celda del Dueso, en Santoña, el conductor del atropello mortal a una mujer en la S-20 de Santander

Un funcionario de prisiones encontró hoy, miércoles ahorcado y muerto en El Dueso, en Santoña, al conductor del atropello mortal a una mujer en la S-20 en Monte, en Santander, el pasado mes de enero.

E.M.G, de 28 años de edad, llevaba varias horas sin signos vitales y estuvo en prisión provisional desde el día 16 de enero cuando fue detenido por el presunto atropello mortal a una mujer de 72 años.

El hombre conducía una furgoneta y, tras subirse a la acera y atropellar a la mujer, se dio a la fuga a pie, fue detenido en las inmediaciones tras esconderse en una vivienda que no era suya. Tras las pruebas de alcoholemia y sustancias psicotrópicas, dio positivo en alcohol y drogas.

Además, momentos antes al atropello mortal tuvo dos accidentes en la S-20, tras colisionar con otra furgoneta y darse a la fuga sin aportar datos y posteriormente chocó contra un turismo tras cruzar recta una rotonda. Como consecuencia de este segundo suceso, resultó herida leve una pasajera menor de edad.

La furgoneta prosiguió la marcha y se subió a la acera, por la que circuló 35 metros, donde impactó contra una farola del alumbrado público y atropelló a la mujer de 72 años que estaba esperando para cruzar por el paso de peatones con semáforos.

Fruto de las investigaciones, se comprobó que nunca tuvo carné de conducir y que la furgoneta del accidente fue robada poco antes en la zona de la Biblioteca Central.

Después de los hechos y de ser detenido, pasó a disposición judicial como investigado en unas diligencias abiertas por los delitos de homicidio por imprudencia grave; de abandono del lugar del accidente, contra la seguridad vial, hurto de uso de vehículo y de allanamiento, que podrían acarrearle una pena de alrededor de 10 años.

El Juzgado de Instrucción número cuatro de Santander decretó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza y a comienzos del verano se continuaba con la instrucción de la causa por el atropello y E.M.G. seguía en prisión provisional.