lunes. 20.05.2024
El tiempo

Las obras de la integración ferroviaria en Santander empezarán al principio del año 2026

La alcaldesa Gema Igual (PP) y el ministro de Transportes, Óscar Puente (PSOE), trataron asuntos de interés común en materia de movilidad sostenible

Reunión entre los políticos.
Reunión entre los políticos.
Las obras de la integración ferroviaria en Santander empezarán al principio del año 2026

Las obras de la integración ferroviaria en Santander empezarán al principio del año 2026. La alcaldesa de Santander, Gema Igual (PP), y el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente (PSOE), se han reunido hoy, en la sede del Ministerio, para tratar temas de interés común en materia de movilidad sostenible, haciendo hincapié en el desarrollo de las infraestructuras ferroviarias, como la integración del tren en la ciudad y la ampliación de la estación para la llegada de la línea de altas prestaciones.

La alcaldesa ha conocido el cronograma de las actuaciones que se llevarán a cabo en los próximos años para hacer realidad la integración, con el inicio de las primeras obras de la integración urbana del ferrocarril a comienzos de 2026.

Durante el encuentro, ambos han acordado convocar para el próximo día 6 de junio una nueva reunión de la Comisión de Seguimiento del Convenio para la integración ferroviaria en Santander, en la que se oficializarán los plazos de actuación y se trabajará en la adenda que regulará las aportaciones de las tres administraciones implicadas en el proyecto, Ministerio, Gobierno de Cantabria y Ayuntamiento de Santander.

“Los avances que hoy conocemos suponen una buena noticia para Santander porque reactivan, y ahora ya sí con plazos y con un proyecto revisado, uno de los grandes retos que tenemos como ciudad y que desde el Ayuntamiento nos hemos comprometido a hacer realidad desde la colaboración con el resto de administraciones implicadas”, ha subrayado la alcaldesa.

Igual ha manifestado que la integración ferroviaria supone una oportunidad histórica para mejorar la calidad de vida de los vecinos de zonas tan necesitadas de espacios libres como Castilla-Hermida, la calle Alta y su entorno, y como proyecto transformador de ciudad.

Además, ha agradecido la disposición del ministro Óscar Puente para mantener este encuentro, en el que han tomado parte también el secretario de Estado de Transportes, José Antonio Santano; el presidente de la Administración de infraestructuras Ferroviarias (ADIF), Ángel Contreras Marín, y la directora General de planificación de ADIF, Montse Rallo.

Sobre el proyecto

El objetivo de los proyectos es mejorar la integración de la estación con la ciudad, racionalizando la superficie de la playa de vías, lo que permitirá liberar espacio para la ciudad, y generar un nuevo espacio público a dos alturas sobre la superficie de cubrimiento de los andenes.  

El proyecto contempla actuaciones como cubrir las vías y andenes desde la cabecera hasta la pasarela peatonal que conectan las calles Alta y Castilla, la integración de los servicios de viajeros en un único edificio, la reordenación de espacios o la construcción del nuevo edificio de oficinas, cuyo proyecto se acordó actualizar a finales de 2023 y está prevista su aprobación a finales de este año para poder licitar las obras en 2025. Posteriormente, se licitará la estación.

El alcance de los proyectos que se está desarrollando es el siguiente: la modernización y ampliación de la estación con la rehabilitación y modernización de Estación de Red Convencional (Pabellón Norte), para unificar en un único edificio de viajeros la prestación de todos los servicios ferroviarios, Largo Recorrido, Media Distancia, Cercanías y RAM, y construcción de un nuevo volumen adosado al pabellón norte que permitirá ampliar la superficie del edificio de viajeros y crear una nueva conexión de la plaza de las Estaciones con el Paseo del Agua.

Además, se creará un nuevo Edificio de Usos Ferroviarios, cuyo objetivo será trasladar y reubicar a las personas que trabajan en las dependencias dispersas por el complejo ferroviario de Santander y diseñar un nuevo edificio respetuoso con su entorno y alineado con la visión y concepto de ADIF, que pueda albergar usos de distinta naturaleza, como los administrativos y operativos vinculados a la explotación ferroviaria, y los servicios formativos de apoyo y sanitarios.

Para finalizar, se reordenarán los espacios, cuyo objetivo es racionalizar la superficie que ocupan actualmente la playa de vías y las instalaciones ferroviarias, para por una parte optimizar la prestación del servicio ferroviario, y por otra, liberar espacios para mejorar la integración del ferrocarril en la ciudad. 

Vox

La portavoz de Vox, Laura Velasco, ha censurado que PP y PSOE sigan adelante con la idea de instalar la losa de la vergüenza en la integración ferroviaria.

Así ha reaccionado tras la reunión de la alcaldesa con el ministro socialista de Transportes en el que anunciaron que comenzarán las obras en 2026.

“Es una vergüenza que los dos representantes que deciden sobre esta obra tan importante para Santander estén de acuerdo en ejecutar un proyecto que es rechazado por la gran mayoría de los vecinos de Castilla-Hermida y el resto de santanderinos”, explica.

En este sentido, Velasco exige al “Gobierno de España y al Ayuntamiento que escuchen el sentir de los santanderinos y rectifiquen”.

“Tal y como llevamos denunciando desde que llegamos al consistorio exigimos que se nos trate como al resto de regiones, ya que la prioridad de los gobiernos populares y socialistas siempre ha sido la de beneficiar a aquellas Comunidades separatistas realizando inversiones millonarias como en Bilbao”, insiste.

La portavoz de Vox vuelve a reivindicar el soterramiento de las vías en el proyecto de la integración ferroviaria. “Esta es la mejor solución para solucionar este problema histórico, que es lo que los santanderinos quieren”, ha opinado.

“A todo este despropósito de proyecto, lamentablemente tenemos que hablar de sobrecostes y es que ahora nos enteramos que el edificio de oficinas de la integración ferroviaria costará un 30 por ciento más. Una práctica que es habitual en Santander y que quien lo paga es el contribuyente”, ha concluido.