El Papa León XIV podría visitar la localidad de Isla, en Arnuero, en un próximo viaje a España
Cuatro de sus tatarabuelos de undécima generación habrían vivido en Isla como hidalgos durante el siglo XVI
Lo que en un principio fue sólo un rumor anecdótico, se ha tornado en noticia en los últimos días. Todo ha surgido en el viaje que está realizando estos días el Papa a Turquía y Líbano. Durante el vuelo de ida charló con los periodistas y los corresponsales españoles, quienes le recordaron las invitaciones a visitar nuestro país desde varias instancias.
En una de estas charlas, la corresponsal de la COPE en el Vaticano, Eva Fernández, le recordó sus antepasados familiares españoles, en concreto de Córdoba y de la localidad de Isla, en el municipio de Arnuero, en Cantabria. Y la sorpresa fue que el Sumo Pontífice se acordaba de la localidad, “ah, Isla, sí, sí”, le respondió a la periodista que en ese momento le entregó como obsequio el escudo heráldico de la localidad cántabra.
Todo esto se remonta al mes de junio, cuando el New York Times publicó un estudio sobre las raíces del nuevo Papa, y entre ellas aparecía su ascendencia cántabra. Todo esto se ha confirmado gracias a un estudio del Centro de Estudios Montañeses que, mediante la revisión de las partidas de bautismo y documentos del siglo XVI, ha confirmado los antecedentes cántabros del pontífice por su línea materna. Concretamente, cuatro de sus tatarabuelos de undécima generación habrían vivido en Isla como hidalgos durante el siglo XVI.
Ahora, desde el ayuntamiento de Arnuero ya están pensando qué hacer para conseguir que el Papa les haga una visita, para ello han enviado diversas cartas al obispado, al Gobierno de España y al Gobierno de Cantabria, para invitarle de manera oficial a que conozca el pueblo de sus antepasados.
The New York Times investigó las raíces del nuevo Pontífice e identificó a más de 80 de sus antepasados, de los cuales 40 proceden de Francia, 24 de Italia y 21 de España, entre ellos de Isla, según el censo de 1573 de esta localidad. Según esta investigación, uno de los nietos de sus tatarabuelos fue Diego de Arana Valladar, capitán de mar y tierra de la Real Armada.
Éste tuvo un hijo, Diego de Arana Isla, que tenía nueve años cuando murió su padre. Viajó por todo el mundo en el ejército español y se estableció en Cuba hacia 1663, donde murió en 1684. La familia continuó viviendo en Cuba, país en el que nacieron cuatro generaciones de la línea materna de León XIV, concretamente en La Habana. Según el documento hay fiabilidad en el seguimiento de seis generaciones.
“Podéis tener más que esperanza”, aseguró el Papa a los periodistas españoles que volaban con él sobre un futuro viaje a España. Y nadie descarta que entre los destinos del viaje se incluyera a Cantabria para conocer la tierra de sus ancestros.
