Las escaleras de San Martín, en Santoña, lucen el arte naif y los versos de dos santoñeses

El alcalde y los autores del trabajo en las escaleras de San Martín, en Santoña. R.A

José Ramón Alonso y Pili García, en colaboración con el Ayuntamiento, concluyeron los trabajos en el acceso a la escultura de la Virgen del Puerto

Las escaleras de San Martín, en Santoña, lucen el arte naif y los versos de dos santoñeses, José Ramón Alonso y Pili García que, en colaboración con el Ayuntamiento, han concluido los trabajos.

Por este motivo, el alcalde de Santoña, Sergio Abascal (PSOE), ha visitado el trabajo realizado que combina estrofas, escrita por José Ramón Alonso, y los dibujos, creación de la ilustradora Pila García, con su marca El Gato Azul en las 16 primera escaleras del acceso a la escultura de la Virgen de Santa María del Puerto, ubicada en el Monte Buciero.

Los objetivos han sido expresar el sentimiento de las personas que visitan el entorno de esa zona, y por otro lado plasmar el ámbito marinero, así como diferentes referencias y las costumbres de la villa.

Tras contemplar la conclusión de la obra, Pili García explicó que ha intentado plasmar muchas cosas, sentimientos, lugares que evocan su niñez, adolescencia y edad adulta en Santoña.

“Podría haberme centrado solamente en la Virgen, y haberlo hecho más simple, más tradicional, pero eso no me convencía mucho. Así que decidí utilizar el arte naif que presume de ser infantil, pero expresa más de lo que se piensa”, comentó.

A partir de esa decisión, decidió dar alegría y color, ya que en su opinión “la mayoría de las personas que van a ver a la Virgen, a las escaleras, busca en cierta forma un alivio, una búsqueda de consuelo y una forma de empezar o acabar el día con una sonrisa y un sentimiento que dé un poco luz. Y que hace la Virgen ha cambio...protegernos”.

Es por ello que ha procurado plasmar esa protección desde el cielo y el universo hasta el fondo marino.

El primer escalón es el universo, el cielo, donde se mira “y creemos que está, y nos ve desde arriba”. En ese escalón aparece el niño, las coronas, el farol, las nubes encerradas en el globo terráqueo, junto a un astronauta cántabro que no le importa recorrer todo el universo para encontrarse con ella.

El segundo escalón evoca al viento y al estuario, el primero representado por una joven de larga cabellera y dentro de la cual aparecen términos y lugares típicos de Santoña del Parque Natural. Junto a ellos, aparecen cuatro de las aves características de las Marismas como es la garza, corregimos, ánades y espátulas.

Los vecinos contemplaron el trabajo. R.A.

Además, en el tercer escalón se pueden apreciar diferentes monumentos y edificios emblemáticos de Santoña, mientras que el cuarto representa el carácter marinero del municipio, con el Faro del Caballo, los barcos en procesión,  el surf como deporte muy conocido en Santoña, sobre todo en Berria,  las playas, las gaviotas y un marinero con su característica boina cántabra, muy usada por los abuelos en otra época.

El quinto escalón se adentra en el fondo marino, el Besugo y la sirena, además de un submarino amarillo del bar el Brisas, mientras que en el sexto está dedicado al fondo y evoca nuestro pasado, los romanos, los franceses, la Prehistoria, el mapa mundi de Juan de la Cosa y la carabela de Santa María.

Versos

“Virgen del Puerto, desde el estuario de esta Bahía hasta los pies del Monte Buciero, rodeada de playas, marismas y roquedales, un soplo de brisa marina mece el paso del caminante hasta llegar a ti”. Estas son las líneas escritas por José Ramón Alonso, quien ha querido trasmitir el sentimiento de los caminantes y viajeros al llegar a la Virgen del Puerto.

“Es un lugar con mucho significado que inspira ternura y sensibilidad, pero unas escaleras de mármol también es un lugar frío al que se le ha querido dar más sentimiento”, explicó. Además, el autor agradeció al Ayuntamiento la posibilidad de escribir algo en las calles de su pueblo para que perdure en el tiempo.

Por su parte, el alcalde, Sergio Abascal (PSOE), declaró que se trata de una actuación sencilla con la que se da vida a un espacio emblemático.

La iniciativa surgió tras una visita de José Ramón Alonso a la ciudad de Málaga, donde cerca del Teatro Romano existen unas escaleras con poemas y dibujos. A partir de este momento, apareció la inspiración de recrear ese trabajo en las escaleras de San Martín.

Con una infografía acudió a la concejala de Cultura, María Román, y al alcalde Sergio Abascal, quienes dieron el visto bueno a la idea.