Condenado a dos años de prisión al portero de un pub por abusar de una menor
El acusado reconoció los hechos y ha consignado 15.000 euros en concepto de indemnización, por lo que el juicio no se celebró
La Audiencia Provincial de Cantabria ha condenado hoy a dos años de prisión a un hombre por abusar de una menor de 16 años de edad cuando ambos se encontraban en un pub de Santander donde el acusado trabajaba como portero.
El juicio estaba previsto que tuviera lugar hoy en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria, pero la vista no se ha celebrado debido a que Fiscalía y la acusación particular han llegado a un acuerdo con la defensa del acusado, quien ha reconocido los hechos y, además, ha consignado judicialmente 15.000 euros en concepto de indemnización.
Ello ha permitido que sea condenado como autor de un delito de abuso sexual con acceso carnal con la concurrencia de la circunstancia atenuante muy cualificada de reparación del daño, lo que ha rebajado la petición de pena solicitada por la Fiscalía de seis a dos años de prisión.
Alcanzada la conformidad, la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria ha dictado sentencia en los términos del acuerdo suscrito por las partes, que supone, además de la pena de prisión, una medida de libertad vigilada durante cuatro años.
Según los hechos que han sido considerados probados, el acusado, portero de un pub de Santander, “aprovechando que la menor se encontraba bajo los efectos de bebidas alcohólicas, procedió a entablar conversación con ella y le pidió que se introdujera con él en el almacén del establecimiento”.
Negativa
Allí, “pese a la negativa de la menor, procedió a bajarle las bragas y penetrarla vaginalmente, hasta que finalmente la menor consiguió abandonar el lugar y regresar con sus amigas”.
A consecuencia de los hechos, la chica “padeció una grave situación de temor y estrés, debiendo someterse a tratamiento psicológico continuado”.
Los hechos, que tuvieron lugar en agosto de 2021, constituyen un delito de abuso sexual con acceso carnal, merecedor de una pena de dos años de prisión, cuatro años de libertad vigilada y una indemnización de 15.000 euros, cantidad que ya ha sido depositada en el juzgado.
