ENTREVISTA

La historia de un astronauta y un gato, primer libro ilustrado de la santoñesa Pilar García Pantaleón

M. Pilar García Pantaleón se ha lanzado con una historia entre un astronauta y un gato. Galería Estudio Pla

La escritora y dibujante no descarta publicar un trabajo sobre la Mitología de Cantabria, mientras continúa con otro relato de estos dos personajes dirigido a los más pequeños

Realmente tenía claro que quería ser escritora, sus inquietudes pasaban por dedicarse a la escritura, crear historias y entretener a los lectores con el mundo que tiene en su cabeza.

Natural de Santoña, M. Pilar García Pantaleón ha dado luz recientemente a esa afición semioculta que siempre ha tenido con la publicación de su primer libro que lleva por título ‘Astronauta y gato. Historias del espacio interior’.

Un trabajo que ha ilustrado y en donde a partir de sus dibujos, la autora habla de la forma de pensar del gato, del amor, el humor, la música, las festividades, los signos zodiacales y de croquetas, muchas croquetas.

“Cuando dibujo y escribo las láminas de estos dos personajes, los mensajes surgen de lo que siento y observo ese día, de conversaciones con amigos, de hechos que observo en las redes sociales, chistes inventados por mi hija Adriana que me cuenta y no sé dónde meterme, reflexiones o críticas, la música que escuchó”, explicó Pilar García. Además, en referencia a su trabajo añade que “a veces aparecen personajes que se identifican con personas que solo ellas saben, pero todas son un poco yo”.

El Gato azul nació sobre el año 2008 o 2009 a raíz de un viaje a Carcasonne con mi chico Fer, papá de Adriana, una ciudad francesa que recuerda con cariño porque les gustó mucho, sobre todo la gastronomía. “A mí me encanta cocinar y un día decidí darle una sorpresa. Le preparé una comida especial, elaboré una carta como si fuera un restaurante y le puse ‘Le chat blue’, el gato azul e hice el garabato de la silueta de un gato”, desvela la autora sobre los orígenes de uno de sus personajes.

El libro está acompañado por sus ilustraciones. Galería Estudio Pla

A partir de esa creación, a Pilar García le gustó tanto que al cabo de unos días cogió un lienzo y dibujó dos gatos, uno azul y otro negro, encima de un tejado y mirando a la luna.

Lo que quedo guardado durante un tiempo, ha servido con los años para poner título a su primera obra. En el momento de empezar, recuerda, que dio muchas vueltas al nombre y precisamente en ese momento se acordó de ese dibujo, pensó en su simbología y a quienes representa.

“Entonces surgió, yo soy ese Gato azul que mira a la luna, quizá con la esperanza de que el gato negro esté mirando orgulloso de él”, explica

En cuanto al astronauta, hay que buscar en uno de sus primeros dibujos para encontrar como apareció este otro personaje “y la verdad no sé por qué apareció en la vida de gato, o quizá fue al revés, el gato apareció en la vida de astronauta".

Para esta escritora e ilustradora ambos son personajes que se complementan a pesar de las diferencias que hay. Al principio, el astronauta es más racional, se sorprende de las ocurrencias de gato, pero con el tiempo se siente más a gusto con su compañía, aparece el amor gatuno, y ambos se convierten en compañeros de vida. “Son el ying y el yang, pero encajan a la perfección”, comentó sobre los personajes de este libro.

Aunque comenzó la carrera de Historia, prefirió dejar estos estudios para no perder el tiempo al descubrir que no era su vocación. Entonces, Mª Pilar García Pantaleón se formó como Técnico de Información y Comercialización Turística. Considera que entre sus facetas, se le da bien el contacto con la gente, explicar hechos, lugares e historias, aunque luego no se ha dedicado a esta profesión.

Sin embargo, sus inquietudes siempre han sido diferentes a su formación. Hace unos años, a raíz de acudir a un curso de escritura creativa, impartido por Carlos del Río, en Santander, descubrió que no era un hobby, sino su verdadera vocación, y con lo que realmente se sentía identificada.

En su casa, su padre, muy aficionado a la lectura, siempre le contaba desde su infancia historias inventadas o no, y entre ellos siempre ha existido ese vínculo, es más, es al primero al que enseña sus escritos para que los lea.

Desde chiquitita

“Por tanto, desde chiquitina he creado historias, he vivido aventuras imaginadas por mí, y cuando ya podía dibujar o escribir, las plasmé”, recuerda esta santoñesa de 42 años.

Tras ocho años alejada de la escritura y después de que naciera su hija, volvió a retomar la actividad. Su mente estaba en un periodo de duelo, tenía que canalizar todo en algo. Al mismo tiempo, una historia de una pandilla de amigos que se tenían que reunir porque uno de ellos fallecía ocupaba su mente. Todo se completó con escuchar una canción del fin de mundo, y a partir de ese momento empezó a darle forma, volvió a surgir la chispa.

Más tarde apareció el curso de escritura, donde vio que no escribía tan mal, los compañeros se reían de los escritos humorísticos que narraba, y posteriormente se presentó a un certamen literario en Santoña, organizado por la Librería Áncora, donde recibió una mención especial.

Así que Pilar García se lanzó. Hace dos años a raíz de un proceso de ansiedad y depresión, la pandemia y esos días de encierro, necesitaba hacer algo, pero se encontraba bloqueada. En esa situación, empezó a dibujar, le venía bien, disfrutaba, supuso una ayudaba para superar esa dolencia, la autoestima subió y sobre todo vio que lo que siempre había deseado se podía hacer realidad.

Además, la autora de ‘Astronauta y gato. Historias del espacio interior’, descubrió que progresaba día a día, comenzó a tener encargos y a pintar en tela, y los primeros pasos del proyecto el Gato azul supuso un chute de adrenalina para su estado de ánimo.

A ello añade, la necesidad de plasmar sus ideas, su mundo, los personajes que pululan en su mente, junto con la autoestima y la autorrealización que, en su opinión, debe tener cada uno para superar los miedos e inseguridades en esta vida. Y por supuesto, no podía faltar que con esta actividad disfruta, se lo pasa genial dibujando y escribiendo.

En Adriana, su hija, tiene su mayor fan y ayudante y evidentemente el día de mañana le gustaría que haga realidad sus sueños, con esfuerzo, constancia y, sobre todo, con diversión, puede ser lo que ella quiera.

“Además es una verdadera satisfacción personal ver que tus dibujos y enseñanzas motivan a mentes pequeñuelas a utilizar la imaginación, tan en desuso a cuenta de las tablet, juegos y la televisión” reflexiona cuando se le pregunta sobre lo que le aporta la escritura y el dibujo.

La ilustradora no descarta publicar un libro sobre la Mitología de Cantabria. Galería Estudio Pla

De igual manera, no se puede olvidar su otra faceta, la ilustración y el dibujo a la antigua usanza, con papel y lápiz.  En sus trabajos ha utilizado varías técnicas, desde lápices de colores, rotuladores, pintura textil y ahora acuarela, quizá con la que más cómoda se siente, técnica que utiliza para diseñar las ilustraciones dedicadas al mundo de la mitología.

Aun así, hace unos meses también utilizó la ilustración digital, por medio de la tablet, donde preparó la historia de Astronauta y gato, y los retratos de personajes famosos o anónimos que realiza también en ocasiones.

En definitiva, que ‘Astronauta y gato. Historias del espacio interior’ es fruto de una autopublicación, donde desde el instante en que surgió la idea y se editó el libro tan solo pasaron días. Lo que en un principio pretendía ser un regalo para Adriana, también para la familia y algún amigo que le encantan las historias de estos dos personajes, se convirtió en su primer libro.

Esa fue la idea principal, pero como ella cuenta, se vino arriba y “de tres ejemplares, pasaron a 20 y luego 30…así que está siendo una sorpresa, porque lo hago todo por las redes sociales”. Si bien, en la actualidad, los puntos de venta han crecido y se puede encontrar en algunas librerías y en comercios locales de Santoña.

Mirando al futuro, esta santoñesa no descarta publicar un libro sobre la Mitología de Cantabria, mientras continúa con otra historia de Astronauta y gato, esta vez dirigido a los más pequeños.

Apasionada

Apasionada de todo tipo de libros y géneros literarios, Pilar García no se siente influenciada por otros escritores en su escritura y tampoco considera que tenga referentes en la ilustración.

Como ella misma explicar “me puede gustar una ilustración de un artista japonés que dibuja gatos, como los autorretratos de Frida Kahlo o los dibujos anime. Me gusta todo y todo me sirve de inspiración. Soy de la opinión que debes saber de todo o por lo menos un poco de todo, porque te permite tener una libertad mental y no encerrarte en un estilo”.

M. Pilar García Pantaleón ha apostado por publicar su historia en papel en un mundo donde los periódicos tradicionales van a menos, frente a lo digital. Desde su punto de vista “vivimos en un mundo en que todo lo descargamos y si no nos gusta lo desechamos, no valoramos ya el gusto de tener un objeto que llevamos tiempo deseando, no hay ilusión por conseguir un libro. Solo los que realmente nos gusta leer nos sentimos tan reacios a usar e-book”.

Esta escritora y dibujante sigue valorando el libro en papel. En su opinión es cuestión de tener un libro que deseas, poder ojear, palpar y sin duda oler el papel. “Es más una cuestión de sentir que de otra cosa. Los amantes de libro solo vemos ventajas”, indica cuando se le pregunta sobre el futuro del libro.

Y para finalizar y tras lanzarse con su primer libro, esta santoñesa, cuando se le pide que aconseje a quien desea dar el primer paso de escribir y publicar, confiesa que no es persona de dar consejos, se sigue considerando una simple aprendiz a la que le queda mucho por delante. “Lo único que puedo decir, y eso se lo digo también a mi hija, es que nunca deje de soñar y luche por ello. Quizá algún día se hace realidad y, a veces, en forma de un raro Gato azul”, reseñó esta escritora y madre de Adriana.