Cantabria contará con un Centro Barnahus ‘Techo Único’ para la atención a los niños y adolescentes víctimas de violencia sexual

La consejera de Empleo y Políticas Sociales, Eugenia Gómez de Diego, presenta el informe `Bajo el mismo techo. Análisis del itinerario de atención a niños, niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual en Cantabria y propuesta de implantación del modelo Barnahaus´.

La consejera de Empleo y Políticas Sociales, Eugenia Gómez (PSOE), presentó el informe ‘Bajo el mismo techo’ elaborado por Save the Children que recoge el itinerario de atención a sus necesidades

La consejera de Empleo y Políticas Sociales, Eugenia Gómez de Diego (PSOE), ha anunciado que Cantabria contará con un Centro Barnahus para aplicar “un modelo que proteja de forma más eficaz el bienestar e interés de los menores que están incursos en un procedimiento judicial” como víctimas de violencia que, generalmente, suponen malos tratos o abusos sexuales.

La titular de Políticas Sociales ha hecho este anuncio durante la presentación de las jornadas e informe ‘Bajo el mismo techo. Análisis del itinerario de atención a los niños, niñas y adolescentes víctimas de violencia sexual en Cantabria’ y de la propuesta de implantación del modelo Barnahus, que ha encargado la Consejería a la Organización No Gubernamental especializada en la infancia, Save the Children.

El modelo Barnahus (palabra islandesa que se traduce como ‘casa de los niños’) es un recurso especializado para atender, desde una unidad centralizada, a niños y adolescentes víctimas de abuso sexual y maltrato.

En su intervención, que ha tenido lugar en la Biblioteca Central de Cantabria, Gómez de Diego ha dicho que la violencia contra la infancia es “una dura realidad contra la que tenemos que luchar” y para visibilizarla es necesario tener datos, conocer los hechos, estudiarla y actuar.

Cuando hablamos de violencia sexual contra la infancia y la adolescencia, “todo lo que no es prevención es llegar demasiado tarde”, ha señalado, pero una vez que es una realidad, es importante ofrecer la mejor atención. “Una atención que sea rápida, coordinada y que podamos trabajar desde justicia, interior, sistemas de protección, y salud todos bajo el mismo techo, aportando soluciones que reduzcan el sufrimiento”.

El objetivo de la jornada y del estudio es “tener herramientas, tejer redes y mejorar el sistema de protección y, también, lanzar un mensaje claro: que los niños y las niñas son sujetos de derechos y tienen derecho a vivir una vida sin violencia”.

Eugenia Gómez ha hablado también de la importancia que está teniendo la Ley Orgánica de Protección Integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia (Lopivi), una norma que entró en vigor en el año 2021 y que ha supuesto “un salto cualitativo y cuantitativo en la defensa de los menores”.

El modelo Barnahus se comenzó a aplicar en Estados Unidos y ha demostrado su capacidad en reducir la victimización secundaria de los menores mediante la atención integral y multidisciplinar. En un único espacio se agrupan profesionales especializados y coordinados que ofrecen todos los servicios que intervienen en un caso de abuso sexual infantil, disminuyendo así la victimización secundaria de los niños víctimas y de sus familias.

La consejera ha anunciado que el ‘Techo único’ forma parte del Centro Regional de Apoyo a los Cuidados y se sitúa físicamente en el edificio del antiguo Centro de Atención a la Infancia y a la Adolescencia (CAIF).

La licitación del proyecto de obra para adecuar el edificio a un centro multiservicios tiene un presupuesto que ronda los 300.000 euros que se subvencionarán con cargo a los fondos europeos ‘Next Generation’ y está a punto de adjudicarse. Con ello, ha explicado, se da un paso más en la transformación del modelo de apoyos y cuidados de larga duración hacía para lograr un sistema que apueste más por la comunidad, por la autonomía y por la mejora de los servicios de protección y apoyo a la infancia.

Este edificio, albergaría también un centro de mejora continua en la formación de los profesionales que se dedican a la tarea de los cuidados y la protección y otros servicios.

Barnahus

Las ‘casas de los niños’ es un modelo que empezó a aplicarse en los Estados Unidos en la década de los 80, pero que tuvo su desarrollo completo en el norte de Europa cuando en 1998 aparecen en Islandia, con una primera casa que incluyó la entrevista forense grabada ante un representante del ámbito judicial para garantizar que la prueba obtenida es válida para el juicio y que el menor no debe volver a declarar.

Con Barnahus todos los profesionales que intervienen en un caso de abuso sexual infantil, trabajadores sociales, psicólogos, médicos, policías y jueces, se coordinan, reciben formación especializada y se desplazan hasta espacios de entorno amigable para niños y adolescentes, las denominadas ‘Barnahus’, casas o edificios situados en zonas residenciales, alejadas de comisarías, hospitales o dependencias judiciales donde se protege a los menores de la revictimización que provoca el proceso judicial, del estigma y de los abusadores.